Escuela para padres V (Comportamiento del niño)
.La vida del niño es, en apariencia, una sucesión de acontecimientos intrascendentes: comer, jugar, explorar el mundo exterior. Su comportamiento no puede considerarse como un simple conjunto de de caprichos y antojos.
-Si el entorno no le es favorable, expresará su descontento y se convertirá en un niño “difícil”: desobediente, revoltoso, agresivo, aficionado a los juegos violentos y a los insultos.
-Las reacciones de oposición se presentan a menudo con motivo de un conflicto familiar que amenaza la seguridad del niño, como, por ejemplo, desavenencias de los padres o divorcio.
-También puede ser el resultado de cambio de profesor o instituto, estudios agobiantes, riñas entre compañeros.
-El nacimiento de un hermano puede ser una causa de inestabilidad que haga surgir su reacción de oposición.
-Cada vez que su hijo se encuentre amenazado por una situación insegura, por algún problema, más o menos real, ante el que íntimamente se declare impotente, se debe acudir en su ayuda.
-El niño retraído es emotivo y se desmoraliza fácilmente.
-La inhibición puede haber sido provocada en el niño por un sentimiento de culpabilidad, por un defecto físico o por una actitud alarmista de los padres que temen se produzca un accidente y le prohíben manifestarse libremente.
-No sirve “empujar” al niño, obligarlo a ser más sociable; es inútil reírse o burlarse de él, ponerle en ridículo o atemorizarle. Debe buscar la causa de su timidez.
-Hay que evitar los temores, castigos, amenazas y promesas de recompensas. Mejor proporcionarle algunos éxitos fáciles que, poco a poco, vayan devolviendo la confianza en sí mismo.
-El miedo y la angustia son dos sentimientos diferentes. El niño tiene miedo al perro, por temor a que le muerda, y al fuego, por temor a quemarse. En cambio, la angustia es la aprensión de algo vago, instintivo e imaginario.
-Los padres son generalmente los responsables de la angustia de sus hijos, al crear en ellos aprensiones y miedos excesivos.
-Si su hijo se orina en la cama, no empeorar se enuresis con amenazas y protestas. Él no tiene la culpa, pero puede delatar casi siempre dificultades afectivas.
-Eliminando las dificultades que originan el conflicto en el niño (riñas familiares, celos, prohibiciones mal comprendidas, etc.), el niño dejará de orinarse en la cama.
-En la etapa lactante es habitual que el niño se lleve todo a la boca. La zona más sensible al tacto son los labios y es la primera forma de reconocer lo que esté a su alcance. La succión de los dedos reaparece de manera transitoria al salir los dientes.
-El morderse las uñas no acarrea ningún peligro para el aparato digestivo, pero es el síntoma de un desequilibrio psíquico o nervioso.
-Los padres pueden ser los responsables del retraso de su hijo para aprender a hablar. Bien porque lo miman demasiado, tratándolo como a un bebé que no puede separase de las faldas de su madre, o bien porque imitan los balbuceos y medias palabras que tanta gracias les hacen, impidiendo que el niño pueda mejorar su vocabulario.
Dr. Avilio Méndez Flores
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…Sugerencias que entendemos pueden ser de utilidad para madres y padres………. El padre o la madre que primero reconoce no saber que hacer ante las conductas disruptivas de su pequeno y que despues siente que ha perdido a su hijo adolescente no puede disfrutar de una buena calidad de vida por muy bien que le vaya economica laboral y socialmente porque ha fracasado en el negocio mas importante la educacion de sus hijos.
HOLA ME GUSTARIA TRATAR ALGUNOS DETALLES DE MI HIJO, TIENE 6 AÑOS
ME GUATA MUCHO ESTE ESPACIO.